La diferencia entre decorar y el home staging:
Aunque mucha gente piensa lo contrario, decoración y “home staging” no es lo mismo. Una de las fundamentales diferencias es que decorar consiste en "vestir" una casa de acuerdo con los gustos personales de sus dueños, mientras que la finalidad del “home staging” es preparar la casa para que guste al mayor número de personas posibles con idea de favorecer su venta.
El objetivo de ambas acciones es mejorar el aspecto de la vivienda, por lo tanto, va a haber claros puntos en común entre una y otra. Sin embargo, el fin en ambos casos es diferente: la decoración, busca renovar y mejorar la estética además de la funcionalidad con el máximo confort para sus propietarios. El “home staging” se hace con la idea de intentar vender o alquilar la casa en el menor tiempo posible y al mejor precio.
Las diferencias principales:
Un proyecto de decoración se realiza de acuerdo a los gustos personales y específicos de una persona, mientras que con el “home staging” se pretende mostrar un estilo de vida ideal, de revista, que atraiga a mucha gente.
Al decorar adaptamos la vivienda a nuestro gusto, añadimos detalles personales, recuerdos u objetos que dejan nuestra huella en el espacio, mientras que con el “home staging” despersonalizamos la casa al máximo y la neutralizamos para que cualquiera pueda imaginarse viviendo en ella. Una prueba de esto es que al decorar, las fotografías son un preciado recurso para personalizar el espacio mientras que si se intenta que todo el mundo se vea viviendo en una casa, las fotografías son lo primero que se quita.
La decoración tiene como prioridades la funcionalidad y la comodidad del día a día, mientras que con el “home staging” se busca crear espacios atractivos para destacar las características y la arquitectura de la propiedad.
Cuando decoramos a menudo cambiamos el mobiliario, acabados, telas y complementos, pero con el “home staging” se intenta aprovechar todo lo existente en la medida de lo posible y se renuevan más los detalles y complementos.
Cuando decoramos están permitidos todos los colores y estilos según el gusto del propietario de la vivienda o del decorador, pero el “home staging” tiende a tonos neutros, colores no estridentes y estilos más bien clásicos.
No hay límites de tamaño o material para la decoración, mientras que con el “home staging” se tiende a utilizar pocos muebles y pequeños. Vendes tu casa, no tus muebles.
Al decorar, la televisión, por ejemplo, forma parte de muchos ambientes porque es una parte indispensable en la mayoría de los hogares, pero cuando se busca vender la casa, se intenta o esconderla o hacer que pase desapercibida ya que puede ser un elemento de distracción para los posibles compradores.
La decoración no te da puntos a la hora de vender tu casa (salvo excepciones en los que tus gustos coincidan con los de un posible comprador), pero con el “home staging” cada detalle tiene un valor para el posible comprador.
Finalmente, a medio camino entre uno y otro se encuentra el “home staging para vivir”, que consiste en tomar lo mejor del “home staging” para nuestra propia casa, ya que a muchas personas les gustan los ambientes que se crean con este último.
Fuente: Idealista.com
